En el mismo contexto de recambio de autoridades, a algunos legisladores del Congreso Nacional se les vence el mandato. Ese es el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, dio un emotivo mensaje de despedida.
«A nosotros no nos sorprenden las dificultades, forman parte de la vida de quien es un militante. Pero si hay algo de lo que nos podemos sentir orgullosos junto a la comunidad de trabajadores es que nunca en estos cuatro años este Congreso votó una ley en contra de los intereses del pueblo argentino», inició.
Además, se disculpó con sus compañeros y con quienes lo nombraron para ese cargo por si alguna vez no supo interpretarlos o comprenderlos. “Trabajé con lealtad por nuestras convicciones políticas y nuestra vocación de servicio tratando de que cada diputado se sienta tratado por igual», agregó.
Luego, remarcó su satisfacción por haber participado en el Poder Legislativo: “Las posiciones políticas cambian, pero lo que queda es la construcción humana. Le estoy agradecido por lo humano, por lo personal, porque cada uno en cada discusión dejó parte de sí. Siento orgullo y lo quiero compartir con los diputados de ser parte de este proceso histórico”.
Por último, concluyó: «Siento mucho orgullo, en mi vida de militante político nunca me había pasado de sentir el orgullo de pertenecer a un gobierno y un poder que cambió la vida de los argentinos para bien. A cada uno de ustedes, muchísimas gracias, y lo mejor para cada uno de ustedes».