El PRO parece haber corrido a la UCR de la disputa alrededor de la federación de intendentes. Ahora busca al jefe comunal de la capital salteña para reemplazar a Julio Pereyra. Alertado por la movida, Sergio Massa reconstruye puentes con los intendentes peronistas.
El macrismo parece haber desistido de impulsar a Ramón Mestre, intendente de Córdoba capital, como presidente de la Federación Argentina de Municipios. Sin embargo, no deja de estar dentro de su horizonte desplazar al justicialismo de la conducción del agrupamiento.
Anteayer se dio una reunión que mantuvieron el intendente de Salta, el massista Gustavo Sáenz, con el subsecretario de Gestión Municipal de la Nación, Lucas Delfino. Este último es encargado de tejer redes en los territorios. Aquí se hace necesario recordar que Sáenz fue candidato a la vicepresidencia por el frente UNA, en fórmula con Sergio Massa.
La actividad fue organizada por el gobierno nacional, bajo el lema de «articular tareas en conjunto». Pero en los hechos, dejó en claro la proximidad del jefe comunal con el oficialismo. Esta jugada alertó al diputado tigrense, que inició contactos con los jefes comunales del PJ, para contrapesar las intenciones del macrismo.
La presidencia de la federación se elige por la mayoría de los votos de los intendentes afiliados. Al presentares como un bloque unido, la UCR y el PRO suman mayor número que los que cuenta el peronismo. Pero si Massa acuerda con el PJ, y los radicales se distancian del macrismo, al no obtener la jefatura, el panorama cambiaría.
Los peronistas en tanto, saben que no cuentan con los números, y apuestan a cogobernar con Cambiemos. Es decir, dejar la presidencia a cambio de la vice a nivel nacional, y sostener la titularidad de la FAM bonaerense, comandada desde su creación, por el intendente de Ituzaingó, Alberto Descalzo.
