Ámbito Financiero informa que Aerolíneas Argentinas otorgó una millonaria concesión para el alojamiento de los pilotos y azafatas en El Calafate a una empresa vinculada a familiares del jefe de Gabinete de la Nación, Marcos Peña Braun.
Según se reveló en las últimas horas, AA contrató a través de una polémica licitación los servicios del hotel boutique «Esplendor», que pertenece a Sebastián y Carlos Marcelo Braun, a través de la compañía Turismo Doss S.A.
Marcos Peña es primo de los Braun por parte de la madre, Clara Braun Cantilo. En el gabinete comparte lazos familiares con el secretario de Comercio, Miguel Braun, que es sobrino de Federico Braun, propietario de la cadena de supermercados La Anónima. Pero en la familia también se cuentan decenas de estancias en la Patagonia, otros hoteles y emprendimientos gastronómicos, una parte del Banco Galicia y empresas alimenticias, como la fábrica de quesos de exportación Pampa Cheese SA, de la que también son dueños los asesores de Peña y Mauricio Macri en la Jefatura de Gabinete, Gustavo Lopetegui y Mario Quintana.
Muchos de los Braun habitan en el club de campo y golf Los Pingüinos, emplazado en el oeste del conurbano bonaerense, lindero al centro de distribución y logística de La Anónima. Allí, entre los vecinos propietarios, se hacen llamar «Patricios», en referencia a la tradición y origen clasista del apellido.
Semanas atrás Aerolíneas llamó a una compulsa de precios para cubrir el servicio de alto nivel para las tripulaciones que vuelan habitualmente a la zona del Glaciar Perito Moreno, en Santa Cruz. Durante nueve años AA alquiló las habitaciones de lujoso Alto Calafate, pero en este caso la empresa estatal que dirige Isela Costantini no la tuvo en cuenta, aunque presentó la mejor oferta.
Alto Calafate ofreció el precio más barato por habitación ($ 1.049), muy por debajo de los $ 1.298 que cotizó el Esplendor de los Braun y los $ 1.471 del tercero oferente, el Xelena. Sin embargo, la aerolínea de bandera desestimó la propuesta más económica por los conflictos judiciales que la rodean y resolvió adquirir los placeres que brinda la familia de Peña. Fuentes de la empresa explicaron a ámbito.com que se eligió «por oferta más conveniente» y que al momento de adjudicar «desconocían» el los lazos familiares del hotel con los Braun y los Peña.
El Esplendor posee 57 cuartos equipados con el máximo confort, restaurant, bar, spa, pileta climatizada, sauna, una cava nacional y un amplio salón de eventos sociales y empresariales. Pero lo mejor, según los que lo visitaron, es la vista panorámica al Lago Argentino.
La polémica en la licitación surgió cuando se les solicitó al Esplendor y Xelena un mejoramiento en las condiciones de sus precios de oferta, ya que Alto Calafate se encontraba fuera de competencia, y los dos hoteles rebajaron apenas 13% y 5%, respectivamente, y por tiempo determinado. Prácticamente volvieron a cotizar lo mismo y AA aceptó sin dudar.
En diálogo con radio La Red, Peña se mostró sorprendido por la contratación y se desvinculó de la propiedad de Esplendor, junto con Miguel Braun. «Que yo sepa el secretario de Comercio no tiene hoteles, no sé si algún pariente, pero la verdad no lo sé«, argumentó.
