Tras la denuncia presentada por el faltante de una de las leches más económicas del mercado en los supermercados (dentro del Programa Precios Cuidados), la diputada nacional Elisa Carrió presentó un proyecto de ley que busca evitar los casos de abuso de posición dominante en los que pudieran incurrir los supermercados y otros grandes proveedores.
Se trata de la «Ley Góndola», que busca garantizar la transparencia en el funcionamiento de los canales de distribución mayorista y minorista, y ampliar la oferta competitiva de productos alimenticios.
«La presente ley será de aplicación a la totalidad de las relaciones comerciales en la que intervengan los operadores de la cadena de valor alimenticia y cuyo objeto esté vinculado en forma directa con el proceso desde la producción hasta la distribución final de alimentos y productos alimenticios», afirma el artículo 2 de la iniciativa.
En su artículo 3, el proyecto plantea resguardar el equilibrio entre los operadores de la cadena de valor alimenticia a fin de evitar que realicen prácticas o acuerdos que perjudiquen a la competencia o los consumidores.
«Si existiera una situación de desequilibrio en el caso de los contratos alimenticios, será obligatoria la existencia de un contrato formalizado por escrito», propone Carrió.