El día de ayer, la Secretaría de Comunicación Pública difundió un documento de 233 páginas titulado “El Estado del Estado. Diagnóstico de la Administración Pública en diciembre de 2015”.
El texto “se trata de una obra en marcha, todavía incompleta, que se irá enriqueciendo a lo largo del año con los informes de las auditorías, las investigaciones de la Oficina Anticorrupción y los nuevos documentos que sigan encontrando los ministerios y los organismos descentralizados”.
El documento incluye el diagnóstico de las áreas de “vivienda, educación, salud, el plan argentina sonríe, PAMI, Casa de Moneda, Banco Central, INDEC, las áreas de industria y comercio, agroindustria, Ministerio de Trabajo, ANSES, ENARSA, CONEA, Nucleoeléctrica Argentina, Yacimientos Carboníferos Río Turbio, las áreas de seguridad y narcotráfico, Fabricaciones Militares, los ministerios de Justicia, Ciencia y Tecnología, la empresa ARSAT, el Correo Argentino, el Sistema Nacional de Medios Públicos, el Centro Cultural Néstor Kirchner (CCK), Tecnópolis, el área de contenidos audiovisuales, Vialidad Nacional, Aerolineas Argentinas, el Belgrano Cargas, la Administración de Infraestructura Ferroviaria (ADIF), la operadora ferroviaria SOFSE, el Organismo Regulador del Sistema de Aeropuertos, la Administración Nacional de Aviación Civil e Intercargo».
El documento señala que en los últimos diez años hubo “una inflación del 700%” y sostiene que “Una posible lección de estos números es que en la década anterior a diciembre de 2015, y al igual que en la década de los ’90, la Argentina consumió más de lo que produjo. En los ’90 pagó la diferencia con endeudamiento. En años más recientes la pagó con inflación”.
Respecto a la situación de las rutas, entre otros temas, resalta, por ejemplo, que “el 40% estaba en pésimo estado, pese a que el presupuesto de Vialidad Nacional se había multiplicado por diez, y la cantidad de kilómetros de ruta con problemas de seguridad había saltado de 1.000 a 3.400. Algo parecido ocurrió con los ferrocarriles. Tras décadas de abandono y falta de inversión, el sector ferroviario fue perdiendo competitividad y empleo. El Belgrano Cargas, por ejemplo, que lleva mercaderías desde el noroeste hasta los puertos exportadores, tuvo en 2015 el peor año de su historia, al transportar sólo 2,5 millones de toneladas de mercadería, tres millones y medio de toneladas menos que en 2001”.
Respecto a la administración pública el documento informa que “de los alrededor de 217.000 empleados de servicio civil en la administración centralizada y descentralizada, más de 70.000 tenían contratos precarios, que debían ser renovados cada año a voluntad de sus jefes de área. No había, además, ninguna coordinación: en diciembre de 2015 se localizaron en la Administración Pública Nacional 36 sistemas distintos de liquidaciones de sueldo y administración de personal”.
Sobre algunos gastos, la introducción detalla que “en diciembre de 2015, por ejemplo, el Estado nacional debía más de 350 millones de pesos en facturas de telefonía fija y móvil y consumo de datos de Internet. Había contratadas 62.000 líneas celulares, de las que 2.300 ya se dieron de baja y unas 20.000 están en análisis. La deuda con las operadoras móviles era de alrededor de 80 millones de pesos. Con las empresas de conexión a Internet, que gestionan los enlaces de los organismos públicos, la deuda era de 187 millones de pesos. A los proveedores de telefonía fija se les debían 83 millones de pesos”.