Una de las principales promesas de campaña de Mauricio Macri para ganar las elecciones presidenciales, fue la modificación del Impuesto a las Ganancias que recae sobre los asalariados. A casi un año de haber ganado la contienda electoral en el ballotage del 22 de noviembre, esa promesa sigue incumplida, por lo cual varios dirigentes fustigan al gobierno Nacional.
A las quejas al respecto del diputado y líder del Frente Renovador, Sergio Massa, se sumó ayer el secretario general de Camioneros, Hugo Moyano, quien advirtió que la demora en los cambios en el gravamen «acarrea broncas en la gente».
«El Gobierno debería dar, antes de fin de año, alguna señal de que este impuesto tan perverso se va a modificar», sostuvo Moyano entrevistado por radio Mitre. Y concluyó: «Cuando un gobierno se compromete a tomar medidas muy concretas y después se olvida, no las toma y se hacen los distraídos, eso acarrea algunas broncas en la gente y eso no se puede negar».
La advertencia de Moyano llegó tres días después de que Massa remarcara que su bloque presionará en la Cámara de Diputados para que la reforma en el impuesto se trate antes de fin de año y no en marzo, como había trascendido que impulsaría el Gobierno.
En este contexto, la iniciativa llegaría finalmente al Congreso en los próximos días y, según los borradores que circularon en las últimas semanas, el mínimo no imponible (MNI) subiría un 15%. Así, el nuevo MNI quedaría apenas por debajo de los $22.000 mensuales netos. Hasta el momento, el Gobierno intentó desligarse de las demoras e insinuó que el proyecto nunca salió de la Casa Rosada por la reticencia de los gobernadores a perder ingresos, dado que parte del tributo es coparticipable.
Se espera que el proyecto oficial impacte en los trabajadores en relación de dependencia con ingresos netos de hasta $ 80.000 mensuales; con una alícuota inicial del 5%; mientras que salarios superiores estarían alcanzados por quitas de hasta 45%. Un nivel que algunos especialistas han calificado de «confiscatorio».
La propuesta del massismo para que el alquiler también pueda ser deducible no parece haber tenido eco en el Gobierno y, según los borradores conocidos, no sería incluida en el texto. En este contexto, Moyano aseguró ayer que «no hay animosidad» de los trabajadores contra el Gobierno «pero sí bronca», porque la administración de Mauricio Macri «no encuentra la solución» a los problemas de ese sector. «Al Gobierno, evidentemente, le faltan algunas medidas que no encuentran la solución adecuada. Dijeron que con esa medida de aumentar los servicios iban a poder tener recaudación y controlar un poco la inflación y no lo han logrado. Hay despidos», remarcó el líder camionero.
