La toma que comenzó en 1989, hoy alberga a 37 familias en el edificio de Pavón 4127. Luego de resistir el 18 de marzo pasado el primer desalojo, los vecinos esperan una nueva fecha para se expulsados.
Por el momento la mesa de diálogo fue cerrada mientras el gobierno porteño se niega a ejecutar la ley 341 que mediante el Instituto de Vivienda de la Ciudad (IVC) debe otorgar créditos habitacionales. En una contraoferta, Acción Social de CABA, solo ofrece un subsidio de 1800 pesos. Mientras, el Grupo Pavón Plaza se prepara para convertir su seño inmobiliario que dejará a 70 niños en la calle.
“La situación actual es muy complicada, las mesas de negociaciones fracasaron y estamos a la expectativa de una nueva fecha de desalojo”, explicó a Abc en Línea el delegado de la casa, Luis Roldan.
“Me dijeron que se cerraban las mesas de negociación, que no había más diálogo porque los dueños no querían saber más nada del tema, quieren el desalojo y recuperar la propiedad”.
El 18 de marzo pasado, las familias resistieron el desalojo firmado por el juez subrogante Fernando Pablo Christello, titular del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil N°46. La causa fue iniciada por el Grupo Plaza Pavón quien compró el inmueble en 2001 -en ese momento con 33 familias adentro de la vivienda- para conformar un emprendimiento inmobiliario.
Roldan, explicó que el propósito de las familias era unificar los créditos y las formas de financiamiento que les otorgarían los gobiernos y de esa manera conseguir “una vivienda digna”, pero la negativa de la ciudad a sentarse a dialogar parece irreversible. Según informaron los vecinos, el gobierno nacional, mediante la Secretaría de Acceso al Hábitat propuso encontrar una salida habitacional que fracasó luego de la ausencia del estado porteño en las reuniones. Ahora, las 37 familias esperan una nueva fecha de desalojo.
“Nosotros pedimos como solución definitiva, una vivienda digna. No estamos dispuestos a irnos de la Capital, si nos vamos a provincia nuestros hijos perderían sus amigos, las murgas, vivieron toda la vida en este barrio”. Pero a esta situación desesperante se sumó que los vecinos denuncia que el IVC no hace más que ignorar la problemática y buscar la división de la organización insistiendo con la misma propuesta: un subsidio de 1800 pesos por un periodo de seis meses
Sin más, según los datos del propio Instituto de Vivienda de la Ciudad, en los ocho años de gestión macrista, solo se brindaron 6121 soluciones habitacionales cumpliéndose solo con el 5 por ciento de la demanda de la ciudad.
El edificio de Pavón 4127 había sido un colegio perteneciente a la colectividad judía que luego dejó de funcionar y entonces fue ocupado, en principio, por 100 personas en 1989. La estructura cuenta actualmente con tres plantas y a la edificación original se incorporaron decenas de hogares.
El reclamo de los vecinos se hizo oír y fue apoyado por diferentes partidos políticos y organizaciones sociales y de derechos humanos como el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), quien se presentó ante el juzgado para incorporarse como “Amicus Curiae” (amigo del Tribunal) a la causa.
