Laly tenía 36 años y vivía en Castelar. Apenas superó en un año el promedio de vida de 35 años que tiene el colectivo travesti-trans en nuestro país, producto de una cadena de discriminaciones, violencias y exclusiones.
Las autoridades desconocen el paradero de los autores del travesticidio: se investiga la hipótesis de que la víctima fue agredida por un grupo de hombres mientras ofrecía sus servicios sexuales en la zona roja del Camino de Cintura.
El hallazgo se produjo este domingo, luego de que el Comando Patrulla de La Matanza recibiera un llamado al 911 que denunciaba que la presencia de un cadáver en la intersección de Arribeños y Monseñor Bufano (Camino de Cintura, ruta provincial 4).
Cuando los agentes arribaron, encontraron el cuerpo sin vida que presentaba un impacto de arma de fuego en la cadera. Antes de matarla, a Laly le dispararon varias veces.
Se descarta que se haya tratado de un episodio de robo: a la víctima no le sustrajeron la plata que llevaba encima.
La causa está caratulada como “homicidio¨. Interviene la Unidad Temática de Homicidios del Departamento Judicial de La Matanza.