La grieta en Juntos por el Cambio se agiganta con la evolución del coronavirus. Un ala dialoguista y con responsabilidad institucional que encabeza Rodríguez Larreta que encuentra eco entre intendentes y gobernadores del radicalismo; y un sector rupturista que detrás del plafón de Mauricio Macri busca desgastar y obstaculizar al presidente de la nación y que encuentra en los radicales Mario Negri y Luis Naidenoff los dos principales puntales junto a Patricia Bullrich.
El último capítulo de esta disputa que crece en intensidad se da en el marco del intento de sesión del parlamento a distancia que impulsan Cristina Fernández y Sergio Massa. Particular, pero luego de la crítica al ‘cierre del congreso’ y al monopolio del ejercicio institucional por parte del Poder Ejecutivo, desde Juntos x el Cambio obstaculizan la sesión del Congreso bajo la modalidad online.
Esta nueva contradicción dentro de las filas del macrismo llevó a un corrimiento de un grupo de legisladores del PRO y de la UCR que firmaron junto al interbloque de Federal de lavagnistas y cordobeses- un pedido de sesión especial para este jueves «en forma telemática» o mixta, con legisladores presentes y otros votando electrónicamente.
Este pedido lo impulsan legisladores que responden a Emilio Monzó y Martín Lousteau y se apoya en los nombres propios de Sebastián García de Luca y los radicales porteños referenciados Emiliano Yacobitti y Carla Carrizo, entre otros.
Gestos varios detrás de esta decisión: una respuesta de Larreta a Macri luego de su reaparición con una firma a un documento internacional contra el populismo; un alineamiento de Monzó y Fregerio detrás del jefe de gobierno; y también un mensaje del radicalismo porteño para Mario Negri que tiene la firma intelectual del ‘coti’ Nosiglia.