A través de una carta redactada desde el penal de Ezeiza, Julio De Vido terminó por explicitar el quiebre en su relación con la ex presidenta Cristina Fernández. Hasta dónde llegará el cruce de acusaciones es la especulación que hoy paraliza al entorno de la electa senadora por la provincia de Buenos Aires.
«Estoy detenido sin juicio previo en dos causas por delitos que no están probados», aseguró en su carta el ex ministro de Planificación a la que el medio INFOBAE tuvo acceso.
También afirma que «unos cacarean en un lado y ponen los huevos en otro, o sea, algunos lo hacemos por convicción, actitud y militancia y otros, cobarde o hipócritamente, o ambas dos, por conveniencia».
«Como todo tiene que ver con todo, días anteriores a mi arbitrario e ilegal pedido de detención ocurrió algo que sin duda alguna tuvo una particular influencia en los medios y no dudo también que en el Congreso, fue cuando alguien dijo, al ser consultada sobre mi gestión, que no ponía las manos en el fuego por nadie, salvo por su entorno familiar e íntimo. Todo muy simultáneo; todo muy coincidente. Demasiado explícito».
«(…) La confianza se da y se quita, se gana y se pierde, la cosas es de a dos, como en el amor. Pero su pérdida no incinera ningún miembro de su cuerpo, nada se quema, sólo DESILUSIONA y a veces MUCHO».
«Ah, si quieren saber dónde estoy, estoy donde estuve SIEMPRE, al lado de NÉSTOR CARLOS KIRCHNER, quien continuó y profundizó la obra de JUAN PERÓN. Aquí estoy y estaré hasta el fin de mis días. Aquí estoy, seguro no me quemaré LAS MANOS»