Con una movilización de más de 10 cuadras, todo a lo largo por Avenida de Mayo, se expresó un colectivo ciudadano heterogéneo y poli clasista. Con intervenciones artísticas y variedad de consignas se denunció la multiplicidad de violencias que cotidianamente se ejercen contra las mujeres en los diferentes ámbitos de la sociedad como los medios de comunicación, la publicidad, el trabajo, la vía pública, y las relaciones de pareja.
A las 18:45 la cabecera de la manifestación, compuesta en su mayoría por gente no encuadrada en organizaciones políticas, pisó los bordes de la plaza de mayo. En ese mismo momento, cerrando la columna, a la atura de Rodríguez Peña, los movimientos sociales y agrupaciones partidarias reclamaban por la libertad de Milagro Sala. “Vivo en una provincia feudal y machista”, explicó Giménez, una mujer de alrededor de 60 años, de piel oscura y rasgos norteños, cuya hija fue asesinada por un efectivo de la policía metropolitana de Jujuy por negarse sistemáticamente a salir con él; la causa fue caratulada como gatillo fácil.
En la movilización confluyeron dos tipos de mensajes: uno vinculado al reclamo por la falta de políticas públicas de asistencia y contención a las víctimas de la violencia de género. El otro, caracterizado por intervenciones creativas, con un objetivo más complejo y a largo plazo: la concientización. El primero se resuelve con una batería de medidas legislativas. El segundo, de una metodología más pedagógica, apela y empuja a un proceso de maduración que interpele al conjunto de la sociedad. “Cuando matan a una piba es el caso más extremo, la violencia contra nosotras se expresa todos los días y de diferentes formas”, explicó Mariana, del colectivo Mujeres Urbanas, mientras a su lado se hacía fila para escribir con indeleble, en papeles pegados a lo largo de las rejas de la plaza de los dos congresos, diferentes hashtag relacionados con el tema: “#mujer bonita es la que lucha”, “#ganar la calle es que me dejes de gritar piropos”, “#quiero vivir en libertad”, “#la mujer no es un pedazo de carne con culo y tetas”.
Mariano Lieutier