Entrevistamos a Federico Tonarelli, integrante de la Cooperativa del Hotel BAUEN y dirigente del movimiento cooperativo. La situación actual de la Cooperativa, la actualidad del movimiento y los rasgos que definen su identidad política en una charla distendida en medio del trabajo diario.
Entrevistador: Fede, ¿Cómo es la situación actual del Bauen?
Federico Tonarelli: La cooperativa del Hotel BAUEN se encuentra en pausa. Llegamos a esta decisión luego de evaluar minuciosamente el delicado momento que vive la actividad turístico hotelera.
Además nuestra entidad continuaba con el histórico conflicto por la posesión del inmueble de la avenida Callao desde 2003. Esta situación nunca resuelta del todo (si bien logramos la aprobación de la ley que declaraba de utilidad pública las instalaciones y que fué vetada por Mauricio Macri en su paso por la presidencia de la nación), siempre fue un condicionante para la gestión de la Cooperativa. En el mismo sentido, las múltiples clausuras de 2018/2019 efectuadas desde el GCBA con un claro objetivo político, redujeron el giro comercial del hotel a su mínima expresión. Esto confirmo nuestra convicción acerca del rol del Macrismo respecto de golpear permanentemente al proceso de recuperación de empresas en general y al BAUEN en particular.
Cuando pensamos que la situación general cambiaría junto a la llegada del nuevo gobierno, sobrevino la pandemia. Fue el golpe de gracia. Por todo esto decidimos desprendernos del histórico edificio y hacer está pausa. Nuestra administración funciona en la actualidad en dependencias del movimiento cooperativo y pensamos reabrir en una nueva sede el próximo año vacuna mediante. Como dijimos en el anuncio que efectuamos en el mes de octubre, hacemos está pausa para rearmarnos y poder continuar con nuestra actividad. Haber seguido sosteniendo el edificio hubiera sido llevar a la Cooperativa a una situación crítica sin posibilidades de continuidad.
E: ¿Qué posibilidades tienen a futuro? ¿Están hablando con el gobierno para encontrar una solución?
FT: Contamos con un claro apoyo del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social -INAES-, y del Ministerio de Turismo a cargo de Matías Lammens, con el cual trabajamos en un ambicioso proyecto de turismo social. Este apoyo concreto nos permitió tomar la decisión de dejar las instalaciones, sabiendo que efectivamente una vez rearmados y superada la etapa más crítica de la pandemia, vamos a poder volver a la actividad y con ello, a todo el trabajo social, político y cultural que siempre tuvo nuestra entidad.
E: Ustedes son parte una FACTA, una Federación de cooperativas y empresas recuperadas. ¿Cuál es tu visión del movimiento cooperativo hoy y de las experiencias de las empresas recuperadas?
FT: Integramos una entidad de segundo grado, una federación nacional de Cooperativas de Trabajadores. La FACTA tiene 60 Cooperativas adheridas de todo el país y además, integra la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo -CNCT- como parte del movimiento cooperativo y por otro lado, como formamos parte del movimiento obrero, integramos también la CTA T que encabeza Hugo Yasky. El momento es también delicado para el conjunto de nuestros compañeros cooperativistas y trabajadores.
El macrismo llevo a nuestro país hacia una crisis fenomenal, no solo de carácter económico, sino también de valores y esto llevará tiempo poder recomponerlo. Pero confiamos en la fuerza del movimiento sindical y del movimiento cooperativo para sobreponerse. Si a esto le sumamos por parte del gobierno nacional líneas de acción en la dirección del trabajo y la producción y una clara propuesta de políticas públicas para el cooperativismo de trabajo alejándose de la especulación financiera que instaló el Macrismo, más temprano que tarde vamos a salir de la actual situación general
E: ¿Cómo es la participación de trabajadores cooperativistas en CTA?
FT: La CTA desde su fundación representa a trabajadores asalariados, activos, desocupados y cooperativistas. Respecto de nuestro trabajo, existen muchas cooperativas de trabajo nucleadas en la central. En la ciudad, es con la secretaria de asistencia social que intentamos justamente brindar asistencia al conjunto de compañeros y compañeras de la central. Además desde la CTA impulsamos el espacio Producción y Trabajo que nuclea a la Mesa Nacional de Unidad Pyme, al movimiento sindical agrupado en la central y en la Corriente Federal de Trabajadores de la CGT, a los pequeños y medianos productores agrarios y obviamente al movimiento de trabajadores autogestionados asociados en cooperativas.
E: Una sorpresa, que muchos no saben, es que vos te identificás como socialista, además de militar activamente en el cooperativismo y en el sindicalismo. Políticamente, ¿dónde estás parado? ¿Cómo ves al socialismo hoy?
FT: Las identidades políticas desde hace tiempo no necesariamente se limitan a las organizaciones partidarias que detentan el sello oficial. Aunque dejé de pertenecer a la organización partidaria hace muchos años, yo me reconozco como socialista. Mi militancia gremial y en el movimiento cooperativo van en línea con aquellos principios y valores que pertenecen al ideario socialista, si bien en lo estrictamente partidario, en este momento integro la conducción del Partido Solidario de la Ciudad. Entiendo al socialismo en la actualidad no solo aquí, sino también en el resto del mundo más como un movimiento que como la organización partidaria tradicional, estática, cruzada por momentos por intereses de carácter burocrático que la alejan del sujeto a representar. Pienso que el socialismo debe ser el motor de las grandes transformaciones democráticas, tanto en las organizaciones de la sociedad civil, de los trabajadores, como así también en las instituciones y organismos estatales. El socialismo tiene el deber de contribuir a la ampliación de los derechos democráticos en el más amplio de los sentidos y jamás debe perder su impulso e instinto transformador, tendiente a terminar con esta etapa neoliberal del capitalismo, que sin duda no hace más que ahondar las desigualdades. Debe ponerse al frente de la lucha por la igualdad de derechos, del cuidado del medio ambiente sin temor al enfrentamiento con los poderes facticos que atentan a diario contra una justa distribución de la riqueza.
E: Tus críticas al Macrismo hacen pensar que no ves con buenos ojos la integración del PS porteño a la filas de JxC. Qué opinión tenés al respecto?
FT: No estoy al tanto de cómo se desarrolla y se define la política partidaria, sus cuestiones al interior de la fuerza, su vida interna y el día a día, ni más ni menos que por la distancia que tengo con la organización desde hace años. Por supuesto que se de su integración a JxC desde las elecciones de 2019. Respecto de esto puedo decirte que no coincido con la caracterización del Gobierno de la Ciudad que escuché en algunas declaraciones que realizó la dirigencia partidaria. El Macrismo representa intereses concretos más allá de duros o moderados o de los buenos modales con los que se presenten el jefe de gobierno y sus funcionarios. Por otra parte las “patas progresistas” de fuerzas de derecha jamás consiguieron siquiera minimizar los costos de los programas neoliberales que aplicaron esas fuerzas. Y por último, no se puede pretender el éxito de ninguna reivindicación popular siendo parte del Macrismo en cualquiera de sus formas.