El Presidente de la Nación pateó el tablero y sorprendió al nombrar a dos nuevos integrantes de la Corte Suprema de la Nación sin recurrir a la instancia del Senado, tal como marca la constitución en su artículo 99 inciso IV.
En un hecho sin precende, Mauricio Macri designó a Carlos Fernando Rosenkrantz y Horacio Daniel Rosatti como integrantes de la Corte Suprema.
Amparándose en el Artículo 99 Inciso 19 de la Constitución, que permite «llenar vacantes de los empleos, que requieran el acuerdo del Senado, y que ocurran durante su receso, por medio de nombramientos en comisión que expirarán al fin de la próxima legislatura», Mauricio Macri atropelló al senado de la nación y rompió con todo tipo de tradición jurídica y política.
Considerando la abrumadora mayoría con la que cuenta el FPV-PJ en el senado de la nación, el nuevo gobierno decidió hacer caso omiso a la división de poderes y a través de una decisión unilateral del poder ejecutivo nombró dos nuevos magistrados en un hecho sin precedentes en la historia argentina.
