“Yo me voy a la mierda, ustedes hagan lo que quieran”, le dijo Carlos Arroyo esta mañana a sus funcionarios cuando esperaba en la playa frente al Museo MAR la llegada de la gobernadora María Eugenia Vidal para inaugurar las playas públicas equipadas.
«Este no es un lugar digno para un intendente, yo me voy a la mierda» dijo Arroyo. Es que el lugar era detrás de una valla en pleno rayo del sol. Esto se inscribe en medio de la mala relación que el mandatario tiene con Vidal.
“Se fue enojado”, comentaron los que escucharon la frase. En la playa quedó parte de su gabinete: la presidenta del Emtur, Gabriela Magnoler; el secretario de Educación, Luis Distéfano; el de Obras, Guillermo de Paz, y el de Salud, Gustavo Blanco.
A su vez, los referentes del radicalismo también se retiraron del acto cuando fueron notificados de que únicamente en el palco estarían la gobernadora y el diputado nacional Guillermo Montenegro, posible precandidato a intendente por Cambiemos.