El ex ministro de economía había advertido que la ex presidenta no debía ser candidata, sin embargo, Cristina Fernández desoyó sus consejos y hoy paga los costos de una candidatura que vino a poner fin a sus aspiraciones presidenciales del 2019.
Finalizaba el mes de marzo y Axel Kicillof sorprendió al señalar durante una entrevista que “En estas elecciones no plebiscitamos a Cristina sino a Macri”, y en la misma línea aseguró que “al Gobierno le conviene que las elecciones pasen por si gana o no Cristina”.
El tiempo le dió la razón, y el gobierno logró a partir de la candidatura de Cristina Fernández obviar el debate de una irregular gestión y situar la campaña en torno a la polarización con el kirchnerismo, hecho que no solo barrió a Massa del escenario sino que también encapsuló a la ex mandataria en el nicho electoral duro que dos años atŕas acompañó a Aníbal Fernández.
El plebiscito a Cristina Fernández terminó por justificar el camino a la reeleción de Mauricio Macri.
