Luego de dos intentos fallidos, el gobierno de Mauricio Macri intentará establecer la Reforma Laboral de hecho a través de la presión a los sindicatos para que modifiquen sus convenios colectivos de trabajo.
Reducción de la jornada laboral a 6 o 4 horas en industrias en crisis y la creación un fondo de cese laboral pagado por los empleados son algunas de las medidas que pretende imponer el macrismo sin pasar por el Congreso.
Según consignó el diario La Nación, el oficialismo presentará un proyecto de ley con menos pretensiones para la Reforma Laboral, sin embargo, persistirá con las medidas más agresivas para los trabajadores con un nuevo método: La modificación de los convenios colectivos.
De esa forma, el Gobierno buscará extender lo que ya logró con la UOM, la UOCRA y los Petroleros en distintas oportunidades.
La medida más polémica es la de que sean los propios trabajadores los que se paguen su indemnización a través de un fondo de cese laboral, como ya implementa la UOCRA, En el caso del sindicato de constructores se le retiene a cada trabajador entre el 12% y el 8% de su salario (decisión a cargo del empleador) y el acumulado de ese monto le es entregado recién al final del vínculo laboral, como substituto de la indemnización.
La idea del macrismo es aplicarlo en los trabajos temporales, como los peones rurales de UATRE o los taxistas. Sin embargo, los abogados laboralistas ya plantearon que esa medida es inconstitucional, ya que la reglamentación del convenio no puede estar por encima de una ley de orden público.
Otra de las medidas que intentarán forzar en los convenios laborales será la de reducción horaria para empresas en crisis, de forma similar al acuerdo que el Gobierno logró con la UOM. Allí se aplicaron esquemas de reducción horarias y suspensiones de hasta 10 días.