A menos de 15 días para las elecciones abundan por doquier análisis, conjeturas y predicciones sobre los distintos escenarios posibles. En este marco, ABC en Línea entrevistó a Marcelo Koenig, Director de la Escuela de Gobierno de la Jefatura de Gabinete de Ministros de la Nación y dirigente nacional de la Corriente Peronista Descamisados. En este sentido, Koenig hizo un balance de la coyuntura regional, analizando las cuestiones internacionales y nacionales de cada país; también sintetizó lo que, a su criterio, expresan los tres candidatos con posibilidades de ganar las próximas elecciones, como así también un balance sobre los temas que quedan pendientes luego de una década de avances. De este modo, el dirigente se refirió al desafió que tienen los sectores populares de cara a la próxima etapa.
ABC en Línea: ¿Cuál es el balance político que haces de la situación regional en la actualidad?
Marcelo Koenig: Yo creo que el proceso de integración regional que había tomado un avance con la llegada de los gobiernos populares a cada uno de los países hoy, como dice el presidente Correa, está bastante empantanado. Esto tiene que ver con dos cuestiones, una de índole internacional y otra de índole nacional. En el plano internacional, en Latinoamérica se está jugando parte de la disputa del poder mundial. Con la llegada de la multipolaridad, que festejamos porque nos da un poco más de autonomía, hubo un repliegue de la propia política norteamericana y de los grupos transnacionales que muchas veces tratan impulsar nuevamente esa política, como el nuevo ALCA que está propuesto para la zona del Pacífico. Esta vuelta de la política norteamericana a la región lo que hace es complicar los procesos de integración, sobre todo en lo referido a las cuestiones nacionales. Así, en cada uno de los países se ha recrudecido mucho más la disputa, se ha embarrado mucho más la cancha y al atender esos procesos populares, cada uno desde su propio país, en su propia disputa, han puesto el proceso de integración en segundo plano y hoy ese proceso está trabado.
ABC en Línea: En cuanto al plano nacional, ¿qué expresan los tres candidatos que tienen más chances de ganar y cuál es el rol de los movimientos populares frente a esta disyuntiva?
Marcelo Koenig: Massa representa, en términos históricos, los intereses norteamericanos más claros, disfrazado con algunas expresiones desarrollistas. De hecho no es casualidad que Lavagna sea parte de su equipo económico, pero al mismo tiempo subordinados y muchas veces posicionándose desde los peores discursos de la derecha, como cuando dice que va a convocar a las fuerzas armadas para que entren a reprimir a los barrios. En el caso de Macri, él cada vez más se posiciona como el candidato del capital financiero, el candidato del endeudamiento; de hecho la práctica que él ha hecho en la Ciudad es haberse endeudado fuertemente en dólares.
Por otro lado, Daniel Scioli es el candidato que expresa claramente la continuidad de este proyecto político. No hay posibilidad de la continuidad de un proyecto político si no es a partir de la victoria electoral y en eso es fundamental, para nosotros, trabajar para construir esa victoria.
Respondiendo a la segunda pregunta, creo que nuestro rol como movimientos populares es tratar de inclinar la cancha en favor de la resolución de las necesidades de los más humildes y en defensa de los intereses nacionales.
La militancia no tiene que ser un sindicato de aplaudidores que sirva para llenar los actos, tiene que discutir el proyecto de país, y yo creo que ésas y muchas otras cosas nosotros tenemos que poner en agenda
ABC en Línea: Del 2003 a la actualidad se ha avanzado mucho en nuestro país en lo referido a la conquista de derechos políticos y sociales, también ha mejorado la calidad de vida de una gran mayoría de la población. Pese a esto, existe aún una parte de la sociedad que vive en situación de precariedad. ¿Cuáles son los desafíos para la etapa del desarrollo que propone Daniel Scioli?
Marcelo Koenig: Como dijo la Presidenta, este proyecto tiene sentido mientras haya un solo pobre. No es como dice Macri, que con un decreto se acaba la pobreza. Esto depende de un proceso de inclusión mediante el trabajo, que es lo que se viene haciendo.
En este sentido, este proceso político incluyó a las grandes mayorías mediante distintos instrumentos de integración, algunos que integran al trabajo el núcleo central y otros que son más precarios. No es lo mismo que tener un trabajo estable con derechos, que uno en negro, son distintos niveles de inclusión que, sin duda, tienen impacto y consecuencias distintas. Por eso, yo creo que el desafío de la profundización está en generar mayores niveles de trabajo con derecho, en discutir cómo se distribuye la riqueza y cómo se distribuye el trabajo.
En ese sentido, el gran desafío para los próximos tiempos es mejorar la calidad de la inclusión, y ahí es donde si Scioli toma la decisión de crear un Ministerio de la Economía Popular quizás se pueda dar un paso importante en la transformación del subsidio en salario, que alguien tenga por un trabajo digno una entrada digna y en blanco, con todos los derechos que eso implica.
ABC en Línea: Álvaro García Linera recientemente dijo que 2016, 2017 y 2018 son años de transición para la región ¿Cómo ve a las fuerzas que integran el campo popular de cara a los próximos años?
Marcelo Koenig: Yo creo que todavía hoy hay mucha incertidumbre al respecto. Las fuerzas populares han crecido al calor de la ética que proponía el kirchnerismo, que más allá de las realizaciones materiales, construía un sentido de la sociedad que iba en el mismo sentido de la militancia y eso permitió crecer a las distintas fuerzas. Ahora, también esas organizaciones que nosotros hemos conformado tienen un montón de límites. Uno de ellos es pensar que el rol de la militancia es ser el intermediario entre el Estado y las masas, esta idea de que la militancia está para bajar cuestiones de recursos, yo creo que eso en la etapa que viene se va a complejizar. Creo que el Estado hay que pintarlo de “cabecitas negras”, dejar de ser la intermediación y que los sectores populares sean los que definan en el Estado las políticas públicas, eso sería un salto cualitativo. Nosotros estamos dispuestos a dar la discusión para que esto sea posible.
La política no es nunca la unidad, sino que la unidad hace a la política
ABC en Línea: La concentración de la economía, la dependencia de la soja y la precarización laboral son algunos de los temas que quedan pendientes luego de más de 10 años de avances. ¿Cómo se avanza en este sentido? ¿Está esto en la agenda de Daniel Scioli?
Marcelo Koenig: Si no está en agenda, lo tenemos que poner nosotros. Yo creo que la militancia no tiene que ser un sindicato de aplaudidores que sirva para llenar los actos. La militancia tiene que discutir el proyecto de país, y yo creo que ésas y muchas otras cosas nosotros tenemos que poner en agenda. Tenemos que poner en agenda la discusión de que se arme una nueva constitución emancipadora que sea el reflejo de la constitución de 1949 y de las nuevas constituciones de muchos de los países sudamericanos, como las de Bolivia, Ecuador y Venezuela, que expresan un constitucionalismo popular rompiendo el mito que las constituciones las escriben solamente los abogados.
ABC en Línea: Para finalizar, ¿es posible un proceso de unidad de todo el campo popular en la etapa que viene?
Marcelo Koenig: Creo que las contradicciones no son ideológicas, son políticas. Uno puede tener conciencia ideológica, pero si no tiene conciencia política es difícil construir unidad. No se puede construir un proyecto de país liberado y votar en contra del Frente para la Victoria. Si bien puede haber articulaciones y proceso reivindicativos comunes, eso no es mi mirada de la unidad del movimiento popular, que es una mirada de unidad política. En esto, la política no es nunca la unidad, sino que la unidad hace a la política. Es decir, la unidad solo va a ser fruto que se pueda acertar en las políticas y ese acierto en las políticas va a llamar a muchos a que muchos se interpelen por esas políticas, aceptando las contradicciones que tienen los procesos políticos nacionales, ahí está la clave.
