Otro manoteo a los haberes de los jubilados

En base al nuevo índice de movilidad que se aplica por tercera vez este año, el Gobierno determinó que a partir del primero de septiembre, las jubilaciones aumentarán 6,68%. Sin embargo, los previsionalistas estiman que si la inflación anual cierra por arriba del 35%, como proyectan las consultoras privadas, los abuelos perderán hasta 8% de poder adquisitivo real.

La jubilación mínima actual es de $ 8.096,30 y la máxima, de $ 59.314,97. Con el nuevo ajuste pasarán a $ 8.637,10 y $ 63.277,20, respectivamente.

Si se toman los últimos 12 meses desde junio para atrás, la suba de precios totalizó 29,5%. Pero desde octubre de 2017 a junio 2018 el costo de vida aumento 23,04%, con lo cual los abuelos perdieron 3,85% de poder de compra real en ese mismo período. Por este motivo, en marzo se dio un bono compensatorio por única vez de entre $ 375 y $ 750, según el caso, y de $ 400 los que perciben la AUH.

Aunque se tome ese bono, la pérdida existe igual: con la fórmula vieja en marzo pasado la suba debió ser del 14,5% (y no 11,73%) y, encima, tres meses antes.

El 15 de agosto se conocerá el dato de julio, que se espera por encima del 3% mensual. Y para fin de año, la pérdida de poder adquisitivo con la nueva fórmula sería más profunda.

«La inflación de 2018 ya se estima en 35,5%. El aumento de los jubilados rondará el 28%. O sea que perdieron cerca de 7,5%», sostuvo la abogada previsional Andrea Falcone para el diario ámbito. «No hay que olvidar que además en el empalme entre las dos leyes de movilidad en marzo perdieron el 8,8%. Si se hubiera respetado la movilidad de marzo, que ahora reconoce la justicia, los jubilados hubieran empatado frente a la inflación este año», proyectó la especialista.

(Visitas Totales 1 , 1 Vistas Hoy)