En un fallo único desde la vuelta de la democracia, la Cámara en lo Contencioso anuló las elecciones en Tucumán. Los magistrados se basaron en declaraciones públicas de funcionarios y en un informe del programa Periodismo Para Todos para sostener que hubo un «aparato clientelar» que afectó a la «pureza del sufragio» y por ende se afectó el normal desarrollo del comicio.
Los jueces Salvador Ruiz y Ebe Piossek estimaron que el 23 de agosto se violó la «pureza y libertad del sufragio» en base a la entrega de bolsones de comida y acarreo de votantes. Para ello, la Cámara se amparó en declaraciones públicas de José Alperovich y el informe del programa de Jorge Lanata que iba en el mismo sentido.
Señalan situaciones vividas por candidatos a concejales del partido Kolina, dentro del FpV, «filmándose en pleno acto de reparto de «bolsones»; o los documentos de video emitidos en programas periodísticos de alcance nacional , dando cuenta de la entrega de bolsas de mercadería distribuidas en taxis con siglas, numeración y nombres de diversos candidatos o la organización de rifas de electrodomésticos y hasta automóviles días antes de los comicios por parte de espacios políticos participantes en la contienda electoral (grabación Programa Periodismo para Todos del 30/08/2015)». El fallo también recuerda la agresión a un camarógrafo cuando intentó filmar el reparto de comida.
Al respecto, los magistrados concluyen que la libertad a la hora de sufragar «solo existe en la medida en que el voto se emite huérfano de violencia, amenazas, apremios y sin la existencia de extorsiones, aprovechamiento de necesidades o promesas de un bien futuro de tipo exclusivamente personal».
El fallo hace mención también a la situación vivida con Gendarmería nacional y las cámaras de seguridad. En ese punto, remarca que pidió a la empresa distribuidora de energía EDET un informe para comprobar si hubo problemas de tensión, tal como explicó el dueño de la empresa INFO JOF. Según el reporte, no se registraron cortes de suministro ni subas o bajas pronunciadas de tensión en la zona donde se localiza la Junta Electoral Provincial y estaban apostadas las cámaras. La Sala I determinó que no se tomaron las medidas de seguridad necesarias para preservar las urnas.
«Los hechos comentados y probados» concluye el escrito, «limitaron o influyeron el libre ejercicio del sufragio de gran parte de la ciudadanía y privaron al acto comicial de la ineludible transparencia que debe ostentar».