El futuro ministro de Hacienda y Finanzas pospondrá hasta marzo la modificación en ganancias; tampoco estimó el precio que tendrá el dólar único.
«El programa de unificar el mercado de cambios es la primera señal para que la economía se empiece a normalizar. Vamos a cumplir con esa promesa lo más rápido que se pueda. Si podemos hacerlo el 14, lo haremos y si no, cuando veamos que estén dadas las condiciones. Entre otras, que haya nuevas autoridades en el Banco Central, porque levantar el cepo con las autoridades actuales sería bastante difícil de implementar» comenzó declarando a La Nación.
Luego se refirió al nivel del futuro dólar único. «No tenemos un nivel. Las cosas las haremos en lo instrumental porque tenemos un objetivo muy claro: en el campo económico, el eje central es hacer todo lo posible para poner la economía en marcha y que con políticas adicionales de distribución del ingreso nos lleve más cerca de la pobreza cero».
Cuando le preguntaron sobre el traslado a precios de una devaluación, Prat-Gay se desligó de ello. «Es parte de la herencia. Hay un descuido voluntario de autoridades que han hecho del control un culto. En nuestro esquema, además de liberar el cepo, tenemos en la cabeza las paritarias de marzo y vamos a plantear a mediados de enero un acuerdo amplio entre sindicatos y empresas en el que hay tres partes en la mesa y cada uno va a tener que poner una parte».
Al ser consultado sobre la relación del Estado y los empresarios, aseguró: «No creemos en los aprietes de Guillermo Moreno, pero tampoco creemos en la ley de la selva». Luego agregó que no tiene prevista reunión alguna con el FMI. «Dialogar no significa que no vamos a ser muy duros en el momento de la negociación» fue la respuesta cuando le preguntaron por el conflicto con los buitres.
Se refirió a la modificación en el impuesto a las ganancias, «muy probablemente con las sesiones ordinarias del 1° de marzo». En relación a los subsidios, «Los vamos a concentrar en la franja de la sociedad que realmente los necesita. Y vamos a encontrar la manera de ir eliminándolos en la franja a la que creo que nunca deberíamos habérselos dado».
Anunció luego que propondrán a devolución del IVA a los bienes de la canasta básica de una franja de la población vulnerable. «La idea es mejorarle un 10% el poder adquisitivo a ocho millones de personas».