Con más de 50 mesas ubicadas en distintas esquinas de la Ciudad, el diputado nacional Marco Lavagna junto a Fernando Barrera, presidente de la Agrupación Blanca Peronista UPCN, dieron el puntapié inicial de un nuevo espacio político en la Ciudad de Buenos Aires.
“Desde nuestro espacio político entendemos que es necesario construir una alternativa conjunta para poder desarrollar una nueva propuesta en la ciudad de Buenos Aires» señaló Barrera, Director del Ente Regulador de Servicios Públicos de CABA.
La presentación fue un claro mensaje para el kirchnerismo. Es que Fernando Barrera es uno de los apoderados del PJ de la Ciudad y su acercamiento a Marco Lavagna profundiza la grieta con la política de la Cámpora en el distrito.
Asimismo, la confluencia entre un sector del PJ y el massismo se inscribe dentro del debate que atraviesa al peronismo de cara a las elecciones presidenciales del 2019. Lejos del acto en San Luis que aglutinó al cristinismo duro junto a un sector de la CGT y al puntano Alberto Rodríguez Sáa, los gobernadores peronistas trabajan en la conformación de un espacio propio que supere el liderazgo de la ex mandataria con el objetivo de interpelar a los argentinos descontentos con la política de ajuste llevada adelante por Mauricio Macri.
«No queremos caer en la trampa que nos deja la dicotomía entre Macri y Cristina, el peronismo tiene el objetivo de construir una alternativa amplia que incluya a todos los sectores y que tenga la capacidad de dialogar con los porteños que se vieron perjudicados por la política económica llevada adelante por Cambiemos», analizó Fernando Barrera en declaraciones exclusivas.
«Las elecciones del 2017 nos tienen que servir para no volver a equivocarnos», y continuó señalando que «Macri quiere al peronismo fragmentado y discutiendo el pasado».
«Tenemos la obligación de construir la agenda del futuro junto a los trabajadores, la clase media y los empresarios», finalizó Barrera.