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Mientras gran parte del mundo se manifiesta por el atentado contra la revista Charlie Hebdo, los crímenes contra la población se siguen sucediendo. Las Naciones Unidas han declarado 2015 como Año Internacional de los Suelos dado que el crecimiento demográfico requerirá aumentar la producción alimentaria en aproximadamente un 60 por ciento y esto depende del uso responsable y la conservación del mismo.
Si bien EE.UU. es uno de los países miembros de las Naciones Unidas, no entiende lo mismo a la hora de extraer de forma indiscriminada el petróleo.
Como todos sabemos, el valor del barril del sigue derrumbándose. Esto se debe a que Estados Unidos está utilizando nuevos métodos para la extracción del crudo. Esta técnica denominada ´fracking´ consiste básicamente en una fracturación hidráulica que se realiza para posibilitar la extracción del gas y/o el petróleo del subsuelo. Mediante la perforación de un pozo vertical para luego realizar una perforación horizontal. A través de una tubería de acero, se inyecta a alta presión millones de litros de agua y arena, y químicos en los pozos. El líquido inyectado a alta presión produce una fragmentación de las rocas porosas liberando el gas. Por último el hidrocarburo producido viaja a través de la tubería de acero hasta su salida al exterior.
Este método no sólo es muy caro, sino que, a su vez tiene un alto poder contaminante, lo que genera problemas en la sustentabilidad de agua potable, fuerte impacto en el ecosistema, contaminación atmosférica y sobre todo contaminación en el suelo. Estados Unidos lo sabe pero en sus planes no tienen un fin netamente económico para alcanzar su pleno abastecimiento. Además de ello tiene un fin político, poner la mira sobre aquel país petrolero que le molesta tanto en la región Latinoamericana: Venezuela. Ya han intentado desestabilizarlo con sus ´golpes blandos´ a través de los medios de comunicación y la violencia armada de parte de la oposición conducida primero por Capiles y luego por Leopoldo López. Como no han podido terminar con el proceso revolucionario chavista tras la muerte de Chávez, ahora quieren desestabilizar la conducción del presidente Maduro con la baja del barril de petróleo.
Así lo manifestó Maduro. “Esto tiene como objetivo geopolítico lograr ´por la vía del esquisto´ lo que antes intentó por ´la vía militar´, que es afectar a Rusia, a Irán (…) y darle con el otro codo a Venezuela”.
El Gobierno venezolano ha asegurado en reiteradas oportunidades que la economía de su país está preparada para cumplir sus compromisos económicos nacionales e internacionales sea cual sea el precio del petróleo. Y ante el primer alerta amarilla, Venezuela ha propuesto a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) convocar una reunión extraordinaria.
Los estadounidenses aún no han entendido que Venezuela es un país con una moral muy fuerte, que puede sentarse a esperar que baje la marea. Nuestro país hermano cuenta con la producción más grande de petróleo, pero más aun con un fuerte espíritu revolucionario que no será diezmado.
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