El intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, se refirió este miércoles durante una entrevista televisiva a los audios en los que el sobrino de Jorge Castillo, máximo organizador de la feria ilegal de La Salada, y actualmente detenido, habla de «pagar una tasa especial al municipio a cambio de seguridad». «Me preocupa cuando se duda de mi honestidad», aseguró.
El funcionario rechazó cualquier tipo de vinculación con los integrantes de la familia Castillo, dueños de una de las ferias ilegales ubicadas en un predio de su municipio. «Los delincuentes me nombran, pero no me comprometen», se defendió. «Mi familia está dolida», sostuvo.
«A Adrián Castillo (sobrino de Jorge) no lo vi en mi vida y nunca en mi vida tuve vinculaciones», remarcó en declaraciones a la señal TN. En ese sentido negó connivencia política con el mercado ilegal. «No sabía que Castillo manejaba puestos ilegales», argumentó.
Sin embargo, el intendente reconoció:»Hay complicidad judicial, policial y política» para sostener la feria. «Seguramente esto no se corta acá», añadió en alusión a las responsabilidades de los ilícitos e irregularidades cometidas en el lugar. «No hubo protección política del Municipio», remarcó.
A su vez que recordó que desde 2010 es «denunciante» de las irregularidades de La Salada: «La situación se la planteé a (Daniel) Scioli y (Ricardo) Casal y se realizó el desalojo más grande», sentenció.
Acerca de los videos donde se muestra cómo en La Salada torturaban a las mecheras que allí robaban, precisó: «Es una aberración».
«Estoy preocupado cuando se pone en duda mi honestidad, no voy a opinar sobre qué piensan otros políticos sobre la feria», sostuvo el político ante la consulta sobre la postura de la expresidenta Cristina Fernández Kirchner por la inclusión de Jorge Castillo en una misión comercial que viajó a Angola.