Con el objetivo de obtener información de los libros contables, el juez federal Ariel Lijo, dispuso una orden de presentación en las oficinas de la fundación SUMA, de Gabriela Michetti, en el marco de la investigación por la sustracción de los bolsos con dinero a la vicepresidenta.
El magistrado ordenó el procedimiento en la sede de la Fundación para llevarse los libros contables de la misma y chequear información que no consta en la documentación enviada por la Inspección General de Justicia (IGJ) en el caso.
Sin embargo, voceros del juzgado, afirmaron que los libros no se encontraban allí, sino en poder del contador que lleva los números de la institución. De todas maneras miembros de SUMA se comprometieron a presentar la documentación requerida en persona el jueves en sede judicial.
Por otro lado el juez Lijo recibió las declaraciones juradas que envió la AFIP, de lo que surge que la Fundación recibió $ 4.100.000 en donaciones. Ahora el magistrado debe determinar si esos fondos estaban bancarizados o no.
Luego de la renuncia de los abogados defensores de Michetti, a tres días de haber tomado el caso, se confirmó que actuará como letrado de la funcionaria el ex diputado radical Ricardo Gil Lavedra.
