El Frente Renovador ingresó en la Cámara Alta bonaerense un proyecto de ley para que los municipios puedan tener la posibilidad de emitir un bono para que puedan cancelar las deudas con proveedores, la misma herramienta que la Ley de Presupuesto y el decreto 62/16 instrumentaron para la provincia de Buenos Aires.
«La realidad financiera de la mayoría de los municipios bonaerenses es muy frágil, atraviesan por una situación que con la creciente inflación es cada vez más difícil. Por ello consideramos necesario otorgarles a través de un bono la posibilidad de cumplir con sus compromisos financieros sin afectar su normal funcionamiento», declaró el vicepresidente segundo del Senado de Buenos Aires, Sebastián Galmarini, autor del proyecto en el cual también trabajó la senadora Malena Baro.
En su articulado, la ley presentada por el massismo estipula que esta herramienta financiera les corresponderá a los municipios cuando se trate de deudas corrientes reconocidas, cuando medie controversia judicial o administrativa y/o cuando se trate de obligaciones accesorias a una obligación consolidada. Quedan excluidas de la ley las deudas inferiores a 30.000 pesos, las deudas que los municipios mantengan con su personal por el pago de remuneraciones y deudas previsionales, las deudas con otros municipios y entidades autárquicas o empresas del Estado, y las obligaciones financieras.
Galmarini expresó que «con esta iniciativa pensamos en una herramienta que les permita sanear su situación financiera a la mayoría de las nuevas administraciones que se encontraron con un descalabro económico al asumir la gestión de gobierno, en diciembre pasado».
De acuerdo al proyecto, el municipio afrontará el pago de las obligaciones consolidadas mediante la entrega de «Títulos de Cancelación de Deuda», que podrán ser emitidos hasta el 30 de junio del corriente, con un plazo de hasta 4 años a partir de la fecha de emisión; los mismos deberán abonarse en cuotas trimestrales y consecutivas.
Por su parte, la legisladora por la Cuarta Sección, Malena Baro, manifestó que «los municipios son el primer eslabón del Estado, los que más cerca están de los vecinos y los que conviven con las demandas inmediatas de los bonaerenses. Por ese motivo era necesario que le brindemos desde el ámbito legislativo esta posibilidad de ir normalizando sus situaciones financieras».
Finalmente, Baro remarcó: «entendemos que si bien esta medida no soluciona la totalidad de los inconvenientes de los gobiernos locales cumple las veces de un paliativo para evitar la suspensión de la provisión de servicios que ejecutan, ya que en infinidad de oportunidades son ellos los que se hacen cargo de las falencias de la gestión provincial, aportando sus recursos para el sostenimiento de la seguridad ciudadana, la salud, el transporte, los comedores y la infraestructura escolar, entre otras acciones».