Mucho se dijo respecto al rol de la Cámpora en el gobierno de Alberto Fernández. Lo cierto es que el gabinete fue hecho por el presidente electo y la organización que dirige Máximo Kirchner tendrá pocos lugares pero claves en la gestión de gobierno.
Wado de Pedro y Luana Volnovich tendrán caja, gestión y territorialidad política. Un poder que Máximo Kirchner proyectará al Congreso de la Nación junto a Fernández Sagasti.
El vínculo entre la Casa Rosada y los gobernadores es una potestad que asume parcialmente el ministerio del Interior, lugar que Alberto Fernández reservó para Wado de Pedro, seguramente el dirigente de la Cámpora más aceptado dentro del Partido Justicialista.
La ANSES es un organismo clave para la gestión de gobierno que llevará adelante la Cámpora. Quien estará al frente es la diputada nacional Luana Volnovich, pareja actual de Máximo Kirchner. Lugar clave por el suntuoso presupuesto que administra, y también por la territorialidad de un organismo con presencia en todo el país que probablemente hará las veces de contralor a la gestión social de los intendentes.
Los pocos pero importantes lugares de gestión se complementan con el poder de la Cámpora en el Congreso Nacional. Mientras que en diputados Máximo Kirchner será el titular de la bancada oficial, el liderazgo de la organización se proyecta también al senado con la mendocina Fernández Sagasti.
Hay una pregunta de fondo, ¿habrá una sola bancada en las dos cámaras? Parece difícil que el Frente de Todos pueda constituirse en el poder legislativo. De no suceder, la conducción de los interbloques tendrá relevancia el 10 de diciembre. José Luis Gioja sería un nombre puesto en la cámara baja y Carlos Caserio tendrá que terminar de convercer a Cristina Fernández que será quien será un jugador de veto en el senado.