Por Alejandro Agüero @AleAguero1
El acuerdo de los 10 puntos nació muerto, y a menos de 48hs solo queda un interrogante, ¿quién lo filtró en los medios y para qué?
Todas las miradas apuntaban a Sergio Massa, y efectivamente su pasado lo condena. En el peronismo tienen todavía muy fresca su última operación que terminó en el decreto de Mauricio Macri que puso punto final a la estrategia de listas de adhesión en la provincia de Buenos Aires.
Sin embargo, quien habría sido el encargado de hacer circular por los medios el esqueleto de los 10 puntos fue Marcos Peña, el cerebro electoral de la Casa Rosada. Otra vez Rogelio Frigerio quedó en offside y los radicales aprovecharon el marco para subir la apuesta y pedir que el acuerdo se extienda al plano electoral en una demostración que puso en evidencia que lo que está verdaderamente en juego es la candidatura presidencial de Mauricio Macri.
Consolidar el escenario de la reelección es el gran desafío del jefe de gabinete. El largo plazo para Peña es el 22 de junio, cuando imagina la foto de largada sobre la cual deberá tomar partido el círculo rojo. Cristina, Macri y una tercera vía devaluada, con la grieta como clivaje de campaña.
En el camino a la presentación de listas, el dólar será la clave para frenar el plan V que empujan los factores económicas para tabicar el regreso de Cristina Fernández. Detrás de la hipótesis de María Eugenia Vidal hacen fila los radicales y algunos peronistas que no terminan de convencerse con Roberto Lavagna.
Con el show mediático del acuerdo de los 10 puntos entre el gobierno y el peronismo no k, la Casa Rosada cambió la agenda de la opinión pública y además de activar la polarización con Cristina logró correr del andarivel del consenso a Roberto Lavagna que tuvo que salir rápido con su propio documento.
Más allá de la inviabilidad de cualquier acuerdo político en un año electoral, Mauricio Macri mantendrá el tema en la agenda para dispersar a la oposición y obligar a los empresarios a cerrar filas detrás de su propuesta. El presidente gana tiempo, le tira una bola caliente a la oposición pero por sobre todo bloquea el Plan V de María Eugenia Vidal que se imaginaba como un gran acuerdo nacional que lo suplante en la pelea contra la ex presidenta, que esta semana saldrá nuevamente a la luz con su «lanzamiento» en la feria del Libro.