El ex presidente y la ex gobernadora vuelven al ruedo para mostrare como garantes y articuladores de la unidad opositora. Los intendentes en el centro de la escena.
Luego de un breve distanciamiento estratégico del día a día de la política y de la tensión que signó la relación entre ambos durante el último tramo del gobierno anterior, Mauricio Macri y María Eugenia Vidal volvieron a la actividad para reunirse con dirigentes de Juntos por el Cambio y priorizan hacer pie en la provincia de Buenos Aires.
El ex presidente mantuvo una agenda de reuniones durante el fin de semana y hoy pisó suelo bonaerense cuando se reunió con el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela. La ex gobernadora hará lo propio mañana en Mar del Plata.
La rueda de encuentros que mantuvo Macri comenzó el jueves pasado, cuando mantuvo un almuerzo con Horacio Rodríguez Larreta en las oficinas que el ex jefe de Estado abrió en Avenida del Libertador. Además, recibió a Patricia Bullrich, la nueva presidenta del PRO a nivel nacional.
Según consignó el diario Perfil, el ex mandatario mantuvo conversaciones telefónicas con quien fuera su candidato a vicepresidente en las últimas elecciones, Miguel Ángel Pichetto, y tendría pactada una reunión para esta semana con Vidal.
Antes de ello, se arrimó nuevamente a la política bonaerense al reunirse con el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela. “Hay mucho por mejorar, pero nuestro espacio llegó para quedarse en la política argentina”, tuiteó el jefe comunal tras el encuentro.
Por su parte, Vidal arribará hoy a Mar del Plata, donde se espera que mantenga por la tarde una reunión con legisladores provinciales de la quinta sección, encabezados por el jefe de bloque de diputados bonaerenses de Juntos por el Cambio, Maximiliano Abad.
A la noche, cenará con el intendente marplatense, Guillermo Montenegro, a quien la ex gobernadora escogió en 2019 como el encargado de suceder a Carlos Fernando Arroyo, cuya intendencia estuvo signada por los conflictos con el gobierno provincial tras acceder a la intendencia bajo el sello macrista.
De esta forma, ambos dirigentes pusieron en el centro de la escena a la figura de los intendentes que resistieron al embate electoral del Frente De Todos para hacer pie en la provincia de Buenos Aires.
Sin la mirada cercana de la prensa, Macri y Vidal retornan de a poco a la actividad política, luego del distanciamiento que mostraron durante los dos primeros meses del gobierno del Frente De Todos. Ratificar el liderazgo y mostrarse como garantes de la unidad opositora, los dos principales desafíos.