Siguen las repercusiones del discurso de Mauricio Macri durante los festejos por el ajustado triunfo de Horacio Rodríguez Larreta, no sólo dentro de las filas del PRO, sino también han acusado recibo sus adversarios políticos.
Esta mañana, el candidato a diputado por la provincia de Santa Cruz, Máximo Kirchner, cruzó fuertemente al precandidato presidencial de Cambiemos por su viraje en el mensaje.
En ese sentido, sostuvo que «Ahora quiere dejar todo lo que hace un año y medio pasado quería derogar», agregando luego que «la sociedad tiene que estar atenta con estas muestras de hipocresía».
Acto seguido, el líder de La Cámpora ironizó: «Cuando ayer escuchaba a Macri hablar de la Asignación Universal y de Aerolíneas pensé que era Mariano Recalde». Pero la ironía fue mas allá: señaló que está «bien puesto» el nombre «Cambiemos».
Es entonces que Máximo advierte que «Muchos de los agravios y ataques que hemos recibido tienen que ver con la defensa de estas políticas, por las que ahora, por una mera especulación política se quieren montar». Asimismo, acotó que si bien el PRO no cree en esas políticas, «saben que el pueblo las ha tomado como propias». «Lo que dicen ahora sería bueno, si no fuera que lo hacen por especulación electoral» redondeó.
Por último, marcó las diferencias claras entre el kirchnerismo y la oposición toda: «El Frente Para la Victoria, con su columna vertebral en el peronismo, es un proyecto que nació con una visión muy clara desde Santa Cruz, desde el interior del país, y así ha gobernado y entendiendo las necesidades de su pueblo».
Enfrente, aseguró, un proyecto que nació en la ciudad de Buenos Aires y que hasta ahí le costó imponerse, con «una visión demasiado urbana que desconoce cuáles son los problemas y las realidades de los pueblos». «A ellos les duele mucho la realidad, entonces la quieren modificar a fuerza de tapas y notas de diarios, pero después llegan las elecciones y la sociedad vota y decide, y ellos se terminan enojando con la gente. Hay que tener más respeto por la sociedad».
