La oposición liderada por Juntos por el Cambio se abroqueló sin fisuras y bloqueó el debate de la ley de Alquileres en la Cámara alta y luego se desconectó para no discutir los decretos firmados por el expresidente.
Si bien Cristina Fernández sentó a sus 40 senadores (Alperovich prorrogó su licencia por 90 días) a los que sumó a la misionera Magdalena Solari Quintana y el rionegrino Alberto Weretilneck, la articulación de la oposición le negó los 2/3 para avanzar con la agenda de Ley de Alquileres. De fondo, la oposición dejó un mensaje directo a la vicepresidenta, sin negociación no sale el pliego del juez Daniel Rafecas, propuesto por el Poder Ejecutivo como nuevo procurador general de la Nación.
El número mágico de los 2/3 en el senado es de 48 senadores, y para perforar ese número Cristina deberá trabajar en romper el bloque opositor que animan Juntos por el Cambio sumado al Interbloque Federal que lideran Reutemann y Romero. Con ese objetivo, la vicepresidenta con el brazo de Wado de Pedro operará sobre los gobernadores del Radicalismo que requieren y mucho de los fondos del gobierno nacional.
Además, de fondo en el variopinto interbloque de Juntos por el Cambio también subyace la pelea entre dialoguistas y rupturistas respecto al vínculo con el gobierno nacional. Sobre este andarivel también hay un terreno próspero para que camine Cristina Fernández.