La elección provincial estuvo lejos de las expectativas del jefe de gobierno, quien a partir de un triunfo contundente aspiraba a ungirse como el gran ganador de la noche. Como efecto secundario, la actuación desdibujada del PRO en Santa Fe trajo un efecto rebote en la interna de la ciudad, y Gabriela Michetti celebró el paso en falso de Mauricio Macri de cara a la semana final de campaña.
En el bunker del PRO estaban confiados en obtener una diferencia sustancial sobre el socialismo, sin embargo, fueron tan solo seis mil los votos que separaron a ambos frentes electorales constituyendo un empate de hecho.
A pesar de que la elección en Santa Fe no fue la proyectada, no todo el ´macrismo´ lo tomó como una derrota. Es que la senadora Michetti vivió el resultado como una victoria personal ya que golpea directamente la imagen de Macri y debilita en consecuencia a su rival Rodríguez Larreta a tan solo cuatro días del cierre de campaña.
En este sentido, la interna PRO está al rojo vivo en la capital y las últimas encuestas marcan una fuerte paridad entre ambos candidatos. Algunos estudios como los de Poliarquía dan arriba a Larreta mientras que otros como los de González y Valladares colocan a Michetti liderando la intención de votos.
En este orden de cosas, Gabriela Michetti tomó el resultado de Santa Fe como una victoria política, ya que un triunfo abultado del PRO hubiese catapultado la imagen de Macri quien apuesta de manera decidida al triunfo de Larreta.