El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires planteó una mirada crítica sobre los efectos y los resultados de la cuarentena obligatoria dispuesta en la Argentina.
En diálogo con el periodista Jorge Lanata en radio Mitre, el funcionario analizó: “Hay que entender la psicología colectiva de una sociedad que hace 90 días que está entre chicha y limonada; hicimos un esfuerzo con un resultado muy pobre. Si para que el resultado sea eficiente tenemos que sacrificarnos un poco más, entonces tenemos que sacrificarnos un poco más”.
Con este argumento, Berni defendió su idea de realizar una cuarentena súper estricta de 15 días que incluya la suspensión del transporte público. Para ello, dijo que el Estado tiene que aprovechar esta ventana de diez días antes de que se disparen los casos positivos de coronavirus para realizar los preparativos necesarios para que a la ciudadanía no le falte nada durante el aislamiento total.
“Yo creo que la sociedad tiene 15 días de tolerancia. Y esos 15 días hay que usarlos tácticamente de manera eficiente. Ni antes ni después. Esa cuarentena tiene que ser extremadamente estricta. Tienen que ser 15 días de encierro total. Y el Estado debe generar antes los mecanismos para garantizarles a los ciudadanos los alimentos y el dinero necesario”, precisó.
El ministro del gabinete de Axel Kicillof planteó que las grandes empresas deberán hacerse cargo del traslado de sus empleados esenciales y el gobierno nacional deberá realizar operativos compulsivos y aleatorios de testeos, algo que ahora es más factible en virtud de la disponibilidad de kits de testeos de producción nacional.
“Hasta ahora, por un tema de disponiblidad de recursos, se testea solo a los que tienen síntomas. Y hoy la realidad de la Argentina cambió porque los científicos han desarrollados diferentes tests rápidos que ya se están produciendo y son mejores incluso que los PCR”, puntualizó.
Berni dijo que una vez finalizado ese período de 15 días de encierro, las autoridades deben tener listas herramientas para darle certidumbre a la clase media y garantizar el desarrollo productivo. Además, no descartó realizar en agosto un segundo período de aislamiento estricto de 10 días, hasta el arribo de los primeros días de calor de la primavera, cuando podría quedar atrás el virus chino.
“Estados Unidos perdió en tres meses más ciudadanos que en la Segunda Guerra Mundial. Esta es una situación delicada, difícil de entender, porque en los extremos nuestra sociedad es más vulnerable y en el medio están las personas que transitan la enfermedad sin síntomas”, reflexionó.
Según trascendió ayer, luego de una reunión entre Alberto Fernández, Kicillof y Horacio Rodríguez Larreta, por ahora el Poder Ejecutivo no estudia un confinamiento al estilo Berni, aunque sí podría anunciar un endurecimiento con respecto a las condiciones de confinamiento que están vigentes. La decisión final se adoptará el jueves, en un encuentro que se realizará en la Quinta de Olivos.
Esta mañana, el ministro de Salud, Ginés González García, dijo que buscan evitar el colapso hospitalario. Sin embargo, actualmente sólo están ocupadas 393 camas de las 11.500 que hay disponibles en las terapias intensivas de toda el país.