Los trabajadores de la cooperativa de lanchas taxi «Rumbo Delta» de Tigre aseguraron a la prensa que luego de haber recibido el registro provincial de la entidad, les cortaron la luz y le «secuestraron» el puesto donde vendían sus servicios sobre la estación fluvial. Peligra la fuente laboral de diez familias que históricamente se dedicaron a esa actividad.
La cooperativa consiguió dicho registro que la reconoce como entidad cooperativa hace dos meses. Desde entonces, habían logrado un permiso para tener su stand en un lugar céntrico de la estación fluvial, pero actualmente sus integrantes aseguran: “nos quieren sacar de encima, pretenden llevarnos a un lugar lejano, lejos del turismo y de las lanchas, así es imposible trabajar”.
En total son diez los asociados que trabajan en el lugar, algunos de ellos se dedican a la actividad de taxis náuticos desde hace 40 años, otros desde hace 15. Se constituyeron como cooperativa para mejorar sus condiciones de trabajo, y actualmente expresan: “Ya nos dijeron que en 30 días nos rajan de acá”.
Los trabajadores aseguran que los problemas de ejercer su actividad están relacionadas con la entrega del registro provincial de la cooperativa que les proveyó el concejal y precandidato a intendente del Frente para la Victoria Federico Ugo.
“Luego de reunirnos con el concejal comenzaron nuestros problemas, primero nos cortaron la luz durante unos 20 días y ahora nos secuestraron el puesto de atención al público, vinimos a la mañana del viernes como todos los días y se lo habían llevado, sin decirnos nada», aseguró Carlos Trovato, uno de los cooperativistas.
Por su parte, Ugo manifestó: “nosotros acompañamos a la cooperativa porque consideramos que es una fuente de trabajo que durante años tuvo que sufrir la ausencia del estado municipal, y como tal nos hicimos presentes, pero ahora resulta que recibieron una represalia por ello, es insólito».
Y agregó: “cuando habían conseguido avanzar, le quitan esos beneficios por meras diferencia de banderas políticas. Hoy estarían dejando sin trabajo a diez familias, más que nunca vamos a continuar acompañando a estos trabajadores a defender su trabajo, porque eso es lo debemos promover como estado”.
Por último, Trovato manifestó que: «nosotros no queremos que nos regalen nada, sólo queremos condiciones dignas de trabajo. Hoy el municipio nos obliga a ejercer la actividad de manera ilegal porque no podemos ofrecer nuestros servicios en la calle, pese a tener todos nuestros papeles en regla».