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En el día de la fecha, luego de presentar pacíficamente una nota solicitando una reunión con el Rector de la Universidad Nacional de San Martín, personal de seguridad impidió la entrada al rectorado al plantel docente de la escuela técnica secundaria por orden expresa de las autoridades. El pedido de audiencia responde a que el 24 de diciembre el docente Martín Ferrari fue informado de su desvinculación de la escuela por motivos ideológicos y políticos.
En noviembre de este año, tras rumores de no continuidad de algunos docentes, el director de la escuela Javier Río se comprometió mediante acta escrita a garantizar la continuidad de todo el plantel docente durante el año 2015. A pesar de esto, el director tomó la decisión de apartar al profesor Ferrari argumentando que construía espacios de vínculo y de diálogo con docentes, familiares y organizaciones sociales por fuera del ámbito escolar. Si bien no se presentaron objeciones a su desempeño profesional, es claro que los objetivos educativos que el profesor Ferrari persigue, que apuntan a la organización desde y para la comunidad, con democratización y con participación, son contrarios a los intereses de la dirección, y sin embargo es el horizonte que todo el equipo docente de la Escuela Técnica elige.
La decisión unilateral y arbitraria de la dirección de la escuela es contraria a una forma innovadora de pensar la relación entre escuela y barrio que prioriza la inclusión de jóvenes históricamente vulnerados en sus derechos y excluidos de la escuela tradicional. A su vez coarta la participación de la comunidad organizada en el desarrollo de la escuela. De hecho, el documento fundacional del Ministerio de Educación de la Nación propone el compromiso activo de los docentes en el desarrollo y ejecución del proyecto educativo institucional. La Escuela Secundaria Técnica de la UNSAM en conjunto con la Universidad de Quilmes y con la Universidad de Avellaneda es una de las pioneras en llevar adelante este modelo alternativo de escuela, que logra articular el accionar de Universidades Nacionales con el Ministerio de Educación de la Nación y las organizaciones sociales.
El despido del educador Martín Ferrari, sin notificación previa, contraria los compromisos asumidos por la dirección de la escuela y sin motivos aparentes, más que la persecución ideológica para obstruir un proyecto de construcción política ajeno al de la dirección de la escuela, no sólo viola los derechos laborales del docente sino que implica una amenaza vedada para el resto del plantel. Esto pone en peligro la construcción de un proyecto de una nueva escuela Técnica para nuestro país que permita avanzar en la democratización de la sociedad.
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