El massismo pretende reinstalar las candidaturas en aquellos municipios en los que quedó muy lejos del triunfo en las PASO. En Almirante Brown, por ejemplo, el candidato a intendente de UNA, Mario Serrano, se encuentra esperanzado con la posibilidad de el 25 de octubre llegar a seducir a los votantes de Giustozzi.
Serrano, pese a que en las PASO terminó 37 puntos debajo del ganador, espera poder “reinstalar” su candidatura y revertir la situación para dar pelea por la jefatura municipal. “El balance que hacemos es positivo”, indicó.
“Sacamos un resultado que nos permite estar en el distrito entre los tres principales candidatos y todavía tenemos dos meses de campaña para reinstalar mi candidatura y poder llegar a todos los vecinos de (Almirante) Brown”, analizó Serrano.
En una charla con el portal Info Región, el candidato expresó sus “expectativas positivas” de ampliar el porcentaje logrado en las PASO (15 por ciento) y apunta a sumar a los indecisos, aquellos que votaron en blanco o no pudieron votas y a quienes votaron a Darío Giustozzi.
Analizó, entonces, que los “vecinos que no se acercaron a votar por cuestiones climáticas que representan a 150 mil electores” y advirtió que “deben estar muy enojados con el oficialismo” por las inundaciones en el distrito. La apuesta es también “al 10 por ciento de votos en blanco y a los 50 mil electores que votaron por Darío Giustozzi”. “La totalidad de los votos no van a quedar en el FpV porque no tienen dueño”, apuntó.
“Vamos a ser el único espacio que su candidato, si gana o pierda, se queda en Brown a diferencia de los otros dos (Mariano Cascallares y Carlos Regazzoni) que tienen funciones en la Ciudad de Buenos Aires y en la Provincia”, aseveró.
