La soledad de Martín Insaurralde: amplio repudio de toda la dirigencia a su indefinición política

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Esta semana, Martín Insaurralde renunció a su banca de diputados para hacerse cargo del ejecutivo municipal. Con este movimiento, el lomense buscó acercarse nuevamente a Sergio Massa, aunque lejos de generar empatía dentro del Frente Renovavor recogió un amplio rechazo de dirigentes como Darío Giustozzi, Felipe Solá, Mónica López y Gustavo López, quienes coincidiendo con Diego Bossio, Oscar Parrilli y Gabriel Mariotto, lo criticaron por la farandulización de su campaña como así también por sus permanentes idas y vueltas.

Uno de los primeros en cruzar al intendente de Lomas de Zamora fue Gustavo Posse quien afirmó «Insaurralde al kirchnerismo le puede sumar votos, pero a nosotros nos resta». Y fue más lejos aun cuando señaló «el sello nuestro es la gestión y el de Lomas de Zamora no… la mayor mortalidad infantil está ahí, donde faltan cloacas es ahí…». Y sentenció «hay que dejar de ser pavo y sacarse fotos con quien no hay que hacerlo».

Otra massista que no ahorró críticas para Insaurralde fue Darío Giustozzi. El ex intendente de Almirante Brown, y precandidato a gobernador, disparó «La verdad que no entiendo esa forma de construir política. Creo que las construcciones pasan por otro lado. Insaurralde fue parte de un espacio y ahora se va. No me cierra esa forma de actuar.»

Sin embargo, las críticas no se limitaron a la dirigencia del Frente Renovador, ya que también fueron varios kirchneristas que repudiaron la actitud de Insaurralde. Mientras que Diego Bossio lo denominó como el nuevo ´Borocotó´ de la política, Miguel Pichetto sentenció «yo no hago política saliendo con una modelo».

Así las cosas, Martín Insaurralde concluye el 2014 siendo el centro de todas las críticas en la dirigencia bonaerense. Atrás parece haber quedado la etapa donde el FPV y FR se disputaban por el lomense por ser el dirigente con mayor ponderación en la opinión pública. Todo una caso de como la farandulización al extremo de una campaña electoral puede tener un efecto no deseado.

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