El secretario general de la Unión del Personal Civil de la Nación ( UPCN), Andrés Rodríguez, adelantó que ante el deterioro salarial de los empleados públicos exigirán la reapertura de paritaria a partir del mes de diciembre.
En diálogo con la radio AM530, Rodríguez señaló que «vemos esta situación del país con mucha preocupación, porque no es todo la tranquilidad de la plaza cambiaria, sabemos que después de la especulación viene tal vez un momento de estabilidad, pero deja dos secuelas muy fuertes: una es la parálisis de la economía, que está estancada, hay un principio fuerte de recesión que se va a agudizar en los próximos meses, y además hay una inflación galopante, todo eso da la tercer consecuencia que es la pérdida del poder adquisitivo del salario, peligrosidad en mantener el empleo en numerosas actividades, y todo está repercutiendo en el mundo laboral y en la gente que hoy tiene más necesidades».
Consultado sobre el deterioro salarial producto de la inflación y el alza de los precios, el dirigente destacó que «todos los trabajadores tanto de la actividad privada como del Estado y mucho más los del sector informal, estamos perdiendo poder adquisitivo, intentamos recuperarlo porque de alguna forma hemos reabierto paritarias de algún modo y estamos buscando casi mes a mes ponernos a tono, pero indudablemente hay una pérdida importante del poder adquisitivo en todas las actividades».
Respecto de una posible reapertura de negociaciones salariales de los estatales, el titular de UPCN señaló que su gremio ya lo hizo y logró dos bonos otorgados para los meses de octubre y noviembre, y adelantó que «a partir del cumplimiento de ese plazo veremos si volvemos a exigir reapertura de paritarias para ver si mejoramos las condiciones en enero y febrero del año que viene».
Ante una pregunta sobre la cifra de estatales despedidos, dijo que «el número exacto no lo tengo porque hemos recuperado a muchos compañeros a los que en varios organismos se les había aplicado la caducidad de sus contratos. Tenemos una aproximación del total de compañeros que quedaron con dificultades laborales, que son aproximadamente unos 20 mil trabajadores. Pero esto tiene que ver también con los que son becarios, y con los que estaban no con contratos sino con becas».
