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Ernesto Sanz, presidente de la UCR y actual senador de la nación, se pronunció en la misma dirección que Mauricio Macri al adelantar la negativa a acompañar el proyecto de “Ley de pago soberano” impulsado ayer por el poder ejecutivo. Fundamentó su oposición en el hecho de que el gobierno “hizo todo el proceso a espaldas del Congreso y quiere socializar las pérdidas”. Cabe entonces preguntarse si Sanz se encontraba ausente en las dos oportunidades en que el congreso votó a favor de la reestructuración de la deuda.
De todos modos no es extraño el planteo de este senador que intenta por todos los medios, congraciarse con el buitre Mauricio Macri, con quien sueña en conformar una fórmula presidencial para 2015.
Mientras Argentina se encuentra atravesando una situación en que está en juego la dignidad y la soberanía nacional, el Senador prefiere perderse “por la canaleta” de la disputa electoral, demostrando una vez más cuál es su compromiso como Senador.
Mientras el presidente de la UCR se pierde en devaneos electoralistas, el resto de los representantes de FAUNEN se encargan de dejar en evidencia una vez más lo poco amalgamado de su “Frente”. No hay dos que hayan opinado igual respecto al proyecto de Ley: Ricardo Alfonsín no descartó acompañar mientras Hermes Binner deslizó la posibilidad de abstenerse.
La cuestión es que FAUNEN no logra coordinar sus movimientos. Sus principales referentes hace años están embarcados en una carrera presidencial ocupando cargos institucionales para los que no han demostrado la más mínima responsabilidad.
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