Por Alejandro Aguero
La pelea de fondo son los recursos que pierde la provincia de Buenos Aires con el presupuesto 2019, y de este punto central se desprende la puja presidencial.
A esta altura con el desplome de Mauricio Macri en las encuestas, para muchos factores de poder María Eugenia Vidal dejó de ser el plan B, y por el contrario, es la apuesta para aglutinar también a sectores peronismo «racional» y enfrentar a Cristina Fernández en las elecciones presidenciales.
El triunfo electoral del 2017 significó un gran paso adelante para la provincia porque le permitió a Vidal tener la suficiente espalda política para impulsar la rediscusión del fondo del conurbano. No obstante, el éxito político terminó licuado por la galopante inflación y hoy la actualización de los 19 mil millones del corriente año y los fondos que corresponden para el ejercicio 2019 son el eje que terminó por explicitar las diferencias entre nación y provincia.
Es que la cuenta en La Plata es sencilla. Entre la transferencia de responsabilidades por los subsidios al transporte, las tarifas sociales en los servicios públicos y la eliminación del fondo sojero, Buenos Aires pierde unos 40 mil millones de pesos. En conclusión, sin la actualización del fondo del conurbano, otra vez, la provincia vuelve a ser un cuello de botella solo resoluble con el auxilio de nación, y es ahí donde aparece Marcos Peña que quiere a una Vidal depediente de la Casa Rosada. Cualquier asociación con el vínculo Cristina-Scioli es pura casualidad.
En este orden de cosas, quien terminó siendo el vocero de la gobernadora para exponer las diferencias es el ministro de Gobierno bonaerense, Joaquín De la Torre, que apuntó en primer lugar contra Rogelio Frigerio al señalar “No es razonable que al dinero que generan los bonaerenses lo reparta el ministro del Interior con los gobernadores a espaldas de la provincia”.
Ahí no terminó la polémica porque hoy volvió a la carga el ex intendente de San Miguel a través de un tuit furioso dirigido al ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, a partir de una serie de declaraciones que le atribuye Marcelo Bonelli en una nota publicada en el diario Clarín.
Espero que esto que afirma @BonelliOK hoy en Clarín, sobre supuestos dichos de @NicoDujovne, no sea cierto. Sería oportuno que el Ministro lo aclare. pic.twitter.com/YGCoogxyh3
— Joaquín de la Torre (@delatorrej) October 26, 2018
¿La pelea es solo por recursos o será que de fondo se cuelan las aspiraciones políticas de quienes apuntalan la candidatura de María Eugenia Vidal?
Rápido de reflejos, Marcos Peña logró poner en crisis el vínculo entre Frigerio y Vidal, quienes sumados a Rodríguez Larreta y Emilio Monzó fueron los que en el peor momento de la crisis cambiaria le exigieron al presidente la cabeza de su jefe de gabinete.
Los optimistas auguran que el agua no llegará al río, y que a través de un decreto presidencial se actualizará el fondo del conurbano para traer paz con la gobernadora. No obstante, por primera vez los rumores de tensión entre nación y provincia terminaron por colarse en la agenda pública, y en este sentido, las posibles ramificaciones de esta puja podrían modificar el ecosistema político.
Última consideración a resaltar. Otra vez aparece en el centro de la escena una disputa de poder de larga data entre los dos dirigentes de mayor relevancia del sistema político argentino: el presidente y el gobernador bonaerense. Fue anteriormente Menem-Duhalde y más acá en el tiempo Nestor/Cristina-Scioli, eso si, esta vez no se puede hablar de la falta de apego a las instituciones del justicialismo, parece ser que en la denominada «nueva» política habitan las mismas viejas costumbres de siempre.